El presidente de EE.UU., Donald Trump, firmó una orden ejecutiva imponiendo sanciones a la Corte Penal Internacional (CPI) en respuesta a las investigaciones sobre crímenes de guerra que involucran a ciudadanos estadounidenses e israelíes.
Trump acusó al organismo de actuar sin jurisdicción legítima y de abusar de su poder al emitir órdenes de arresto contra el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y el exministro de Defensa, Yoav Gallant. La orden bloquea activos y restringe visas a quienes colaboren con las investigaciones de la CPI sobre EE.UU. y sus aliados.
La medida se produce tras el bloqueo demócrata en el Senado a una propuesta republicana que buscaba sancionar a la CPI en protesta por sus acciones contra Netanyahu y Gallant.
Ante la posibilidad de sanciones, el tribunal tomó precauciones financieras, adelantando el pago de salarios por tres meses y preparándose para posibles restricciones que podrían afectar su operatividad.
La CPI investiga presuntos crímenes de guerra y genocidio cometidos por Israel en Gaza desde la ofensiva iniciada en octubre de 2023. En noviembre, el tribunal emitió órdenes de arresto contra líderes israelíes, pero varios países, incluyendo Alemania, Argentina, Hungría y Polonia, han declarado que no acatarán el mandato si Netanyahu o Gallant ingresan a su territorio.