El gobierno de Donald Trump ha iniciado el despido de cientos de empleados de la Administración Federal de Aviación (FAA), incluyendo personal clave en el mantenimiento de radares y sistemas de navegación.
La decisión llega en un momento crítico para la seguridad aérea, pocas semanas después de una colisión mortal en Washington DC que sigue bajo investigación. Sindicatos y expertos han expresado su preocupación por el impacto de estos despidos en un sistema de control aéreo que ya enfrenta una grave escasez de personal.
Los correos de despido fueron enviados el viernes por la noche a empleados en período de prueba, sin que se alegaran razones de rendimiento o conducta, según David Spero, presidente del sindicato de Especialistas en Seguridad de Aviación Profesional.
Además, la Asociación Nacional de Controladores de Tráfico Aéreo está analizando los efectos de esta medida en la seguridad nacional.
La falta de personal en la FAA ha sido motivo de preocupación durante años, especialmente ante incidentes recientes donde aeronaves han estado a punto de colisionar en aeropuertos de EE.UU.
El despido de un empleado de la FAA que trabajaba en seguridad nacional ha desatado especulaciones sobre motivaciones políticas detrás de estos recortes.
Charles Spitzer-Stadtlander afirmó que su despido ocurrió días después de haber criticado a Tesla y X, ambas empresas de Elon Musk, quien encabeza los esfuerzos de Trump para reducir el tamaño del gobierno.
Mientras tanto, expertos advierten que esta reestructuración podría poner en riesgo la seguridad aérea en uno de los momentos más críticos para la aviación estadounidense.