Trump anuncia nuevos aranceles a partir del 2 de abril, lo que ha generado incertidumbre en los mercados internacionales y preocupación entre los socios comerciales de EE.UU.
El presidente ha denominado este día como el «Día de la Liberación», argumentando que su política busca establecer tarifas «recíprocas» para equilibrar el comercio. Sin embargo, las bolsas asiáticas y europeas ya han reaccionado con fuertes caídas ante la incertidumbre de cómo se implementarán estas medidas y qué países serán los más afectados.
Los nuevos aranceles incluyen un 25% a los vehículos y sus componentes fabricados fuera de EE.UU., golpeando directamente a Canadá, México y China. Además, Trump ha insinuado que no habrá excepciones, aunque ha dejado abierta la posibilidad de aplicar tarifas «más clementes» en ciertos casos.
La Unión Europea y otras naciones han mostrado preocupación, mientras que economistas advierten sobre el impacto negativo en los consumidores y empresas estadounidenses.
Un análisis de la Universidad de Yale estima que los hogares estadounidenses podrían perder más de 2,700 dólares anuales debido a los aranceles, cifra que aumentaría si los países afectados responden con medidas similares.
Mientras tanto, Trump defiende su política como una forma de financiar recortes de impuestos y fortalecer la economía nacional, aunque expertos como el nobel Paul Krugman advierten que estos costos podrían ser mayores a los beneficios esperados.
Trump mete aranceles y al final el que paga es el consumidor
La UE preocupada, pero seguro también preparan su venganza comercial
Yale tirando números y la gente viendo cómo suben los precios en el súper
Decir que los aranceles financian recortes de impuestos suena bonito, pero no cuadra
Krugman siempre le lleva la contraria a Trump, pero aquí tiene razón