El Tribunal Supremo Electoral (TSE) de Guatemala defendió este viernes la investidura de Bernardo Arévalo como presidente del país en enero próximo, luego de que la fiscalía asegurara que los comicios generales deberían ser anulados por supuestas irregularidades.
Los resultados están validados, están oficializados y son inalterables (…)», los funcionarios electos «deben tomar posesión» en enero, «de lo contrario hay rompimiento del orden constitucional», afirmó en rueda de prensa la presidenta del TSE, Blanca Alfaro.
La magistrada aseguró que el Ministerio Público «no tendría ninguna facultad» para hacer que el TSE anule unas elecciones, «salvo una sentencia que venga de la Corte de Constitucionalidad (CC)».
Poco antes, en conferencia de prensa, la fiscal Leonor Morales denunció que hubo anomalías en «las actas finales de cierre de escrutinio» por lo que «son nulas de pleno derecho» para consignar los resultados de las elecciones.
Morales afirmó que las actas no fueron aprobadas «por el pleno» del TSE, por lo que no debieron usarse, y señaló que la investigación se llevó a cabo por denuncia de «un ciudadano», pero no lo identificó ni mencionó responsables, argumentando que el caso está bajo reserva.
El Tribunal Supremo Electoral defiende la legitimidad de las elecciones en Guatemala.
La presidenta del TSE, Blanca Alfaro, asegura que los resultados son oficiales e inalterables.
Se destaca la importancia de respetar la investidura de Bernardo Arévalo como presidente en enero.
Blanca Alfaro sostiene que el Ministerio Público no puede anular elecciones sin una sentencia de la Corte de Constitucionalidad.
La fiscal Leonor Morales denuncia anomalías en las actas finales de cierre de escrutinio.
Morales afirma que estas actas son nulas de pleno derecho y no debieron utilizarse.
La investigación se llevó a cabo a raíz de la denuncia de un ciudadano, según Morales.
No se revelan detalles sobre el denunciante ni se mencionan responsables debido a la reserva del caso.
El TSE resalta la importancia de que los funcionarios electos tomen posesión en enero para evitar un rompimiento del orden constitucional.
La situación política en Guatemala genera debate sobre la validez de las elecciones.
La fiscalía y el TSE mantienen posturas divergentes respecto a la anulación de los comicios generales.
La fiscalía sostiene que las actas no fueron aprobadas por el pleno del TSE, cuestionando su validez.
El caso genera incertidumbre sobre el proceso electoral y sus posibles repercusiones.
La fiscalía mantiene la postura de que las elecciones deberían ser anuladas por las supuestas irregularidades.
La sociedad guatemalteca sigue con atención el desarrollo de los acontecimientos políticos.
La situación refleja la tensión entre diferentes instituciones del Estado en torno a la validez de las elecciones.
¡Bernardo Arévalo es un líder corrupto! El Tribunal Electoral está ciego. ¡Despierten, Guatemala!
¿Y si la elección de Arévalo fue un fraude? ¡Necesitamos transparencia!
¡Qué descaro del tribunal! ¿Realmente creen que fue una elección justa? #FraudeElectoral
¡Totalmente de acuerdo contigo! Es evidente que hubo irregularidades en esta elección. El tribunal debería revisar a fondo lo sucedido y garantizar la transparencia en futuros procesos electorales. No podemos permitir que el fraude se convierta en la norma. #TransparenciaElectoral
¿Qué tal si en lugar de criticar, apoyamos y damos oportunidad al presidente electo?