Las autoridades brasileñas informaron este sábado que los rescatistas han recuperado hasta el momento 21 cuerpos de los 62 pasajeros que viajaban en el avión de la aerolínea Voepass, que se estrelló el viernes en el estado de Sao Paulo.
Un equipo de 200 personas está trabajando en la recuperación de los cuerpos, que serán trasladados a la morgue de São Paulo.
El jefe del Centro de Investigación y Prevención de Accidentes Aeronáuticos (CENIPA) de Brasil, brigadier Marcelo Moren, informó que, según las investigaciones preliminares, no hubo ninguna comunicación de emergencia entre la aeronave, un turbohélice bimotor ATR 72, y la torre de control antes del accidente.
«Es un poco prematuro decirlo, pero lo que tenemos hasta ahora es que no hubo comunicación entre la aeronave y la torre de control avisando que habría una emergencia», señaló Moren.
En un comunicado, CENIPA confirmó que las dos cajas negras del avión, la Cockpit Voice Recorder y la Flight Data Recorder, han sido recuperadas y están en posesión del centro para su análisis.
Inicialmente, la aerolínea informó que había 62 pasajeros a bordo, pero la cifra fue ajustada a 61 después de descubrirse que un pasajero, Constantino Thé Maia, no había abordado el vuelo.
Imágenes captadas por testigos mostraron al avión realizando un giro plano y cayendo verticalmente antes de estrellarse en una comunidad cerrada, dejando el fuselaje consumido por el fuego. Afortunadamente, no se reportaron heridos en tierra. Las labores de rescate se han visto complicadas por la lluvia y las bajas temperaturas del invierno en el hemisferio sur, lo que también llevó a algunos residentes del área a trasladarse temporalmente.Este es el accidente aéreo más mortal en el mundo desde enero de 2023, cuando 72 personas murieron en un accidente de Yeti Airlines en Nepal, involucrando también a un avión ATR 72. El informe final de ese accidente concluyó que fue causado por un error del piloto.
La recuperación de las cajas negras es un paso crucial para entender las causas del trágico accidente.
El esfuerzo coordinado de 200 rescatistas refleja el compromiso de Brasil en la búsqueda de los pasajeros.
La ausencia de heridos en tierra es un alivio en medio de esta tragedia.
Este accidente es un recordatorio trágico de los riesgos del transporte aéreo y la importancia de la seguridad.
Dios le de conditions a sus familiares