La coordinadora humanitaria de la ONU para Haití, Ulrika Richardson, pidió hoy en Ginebra a la comunidad internacional más ayuda para Haití donde la violencia de bandas ha causado 8,000 muertos este año y los criminales controlan un 80 % de la capital Puerto Príncipe,
«Haití vive uno de los peores momentos de su historia reciente», resumió la representante humanitaria de Naciones Unidas, quien también viajó esta semana a Berlín y Bruselas y ha advertido que sólo se han recibido un 33 % de los 720 millones de dólares pedidos a la comunidad internacional para asistir al país caribeño en 2023.
Unos 5,2 millones de haitianos, casi la mitad de la población nacional, necesitan asistencia humanitaria, incluidos 3 millones de niños, y que 4,35 millones sufren inseguridad alimentaria aguda, recordó Richardson en rueda de prensa en la sede europea de la ONU.
«Mucha gente corre grandes riesgos sólo por salir de sus casas e intentar llevar una vida normal; se enfrentan al peligro de ser alcanzados en medio de un tiroteo, de ser secuestrados, linchados o violados», subrayó Richardson, quien denunció el enorme número de mujeres y niñas que han sufrido abusos sexuales.
En octubre, el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas aprobó el despliegue de una misión de seguridad para Haití, que según Richardson podría comenzar a operar en el primer trimestre de 2024, con aproximadamente unos 2,500 policías de Kenia, principal país que se ha ofrecido para participar en esta iniciativa.
La violencia en el país ha producido 200,000 desplazados internos, entre ellos 143,000 en la capital, y ha tenido graves efectos económicos (cuatro años consecutivos de recesión) y sociales, con un sistema sanitario al borde del colapso y las escuelas cerradas desde 2020, año en que las clases se suspendieron por la pandemia.
La llamada de la coordinadora humanitaria de la ONU para Haití, Ulrika Richardson, resalta la urgencia y la necesidad de ayuda internacional para afrontar la crisis humanitaria en el país.
A pesar de los desafíos significativos, la representante de Naciones Unidas destaca la importancia de la solidaridad global para abordar la violencia, la inseguridad alimentaria y otros problemas en Haití.
La petición de más ayuda para Haití refleja un llamado a la acción colectiva y destaca la responsabilidad compartida de la comunidad internacional en momentos críticos.
La advertencia sobre la falta de fondos recibidos subraya la necesidad de un compromiso más sólido para garantizar que las personas vulnerables en Haití reciban la asistencia necesaria.
El hecho de que casi la mitad de la población haitiana necesite asistencia humanitaria destaca la magnitud del desafío y resalta la importancia de un enfoque integral para abordar las múltiples crisis.
La coordinadora humanitaria destaca no solo los desafíos materiales sino también los riesgos personales que enfrenta la población, enfatizando la necesidad de intervenciones urgentes.
La mención de Kenia como el principal país dispuesto a participar en la misión de seguridad destaca la colaboración internacional en la resolución de la crisis haitiana.
La preocupación expresada por la coordinadora humanitaria resalta la importancia de mantener la atención y el compromiso sostenido para superar los desafíos en Haití.
La referencia a los graves efectos económicos y sociales destaca la interconexión de los problemas en Haití y resalta la necesidad de soluciones integrales.
La petición de ayuda para los 3 millones de niños afectados resalta la vulnerabilidad de la juventud haitiana y destaca la importancia de salvaguardar su bienestar.
La descripción de Haití como un país que vive uno de los peores momentos destaca la urgencia y la gravedad de la situación, enfatizando la necesidad de una respuesta rápida y efectiva.
Nadie quiere saber de Haití
La llamada a abordar problemas a largo plazo destaca la necesidad de soluciones sostenibles y estrategias a largo plazo para reconstruir Haití.
¡Qué tal si mejor invierten en educación y prevención de la violencia en Haití!
Creo que deberíamos dejar que Haití se las arregle solo, ya tienen suficiente ayuda.
Estoy de acuerdo, pero ¿qué tal si Haití se convierte en una sociedad sin bandas?
Creo que deberíamos dejar que Haití se las arregle solo. ¿Qué opinan?
¡Qué falta de empatía y solidaridad! Haití necesita nuestro apoyo y colaboración, no podemos darles la espalda en momentos difíciles. Debemos unirnos para ayudar a construir un futuro mejor para todos. ¡Juntos podemos hacer la diferencia!
¡Que se vayan las bandas y se quede la ONU para reconstruir Haití!
Claro que sí, la educación es fundamental, pero también se necesita abordar la corrupción, mejorar las condiciones de vida y crear oportunidades económicas reales. No podemos esperar que la educación resuelva todos los problemas de Haití de la noche a la mañana. ¡Se necesita un enfoque integral!