La organización Save the Children informó que cerca de 200,000 niños desplazados en Haití tienen 5 años o menos, siendo especialmente vulnerables ante la crisis de violencia que azota el país. Muchos han tenido que huir repetidas veces y viven en refugios improvisados sin acceso a servicios básicos como agua potable, alimentos y atención médica.
En Puerto Príncipe, la situación es aún más grave, con bandas armadas controlando hasta el 90 % de la ciudad, dejando a miles de niños expuestos a peligros como el reclutamiento forzado y abusos. Según la ONG, el 2024 fue el año más letal para los menores en Haití, y la inestabilidad sigue afectando gravemente su desarrollo.
Save the Children advierte que, sin intervención urgente, esta crisis podría marcar a toda una generación. La organización insta a frenar la violencia, permitir el acceso de ayuda humanitaria y aumentar la financiación internacional para evitar un mayor deterioro de la situación.
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