Al menos 29 personas murieron y más de 300 mil tuvieron que abandonar sus viviendas en Somalia debido a inundaciones provocadas por lluvias catastróficas, informó la Agencia Nacional de Gestión de Desastres de Somalia (SOMDA).
Las fuertes lluvias en Somalia, país del este de África, provocaron que los asentamientos quedaran inundados como consecuencia del desbordamiento del río Jubba en el suroeste del país.
«Lo que está sucediendo hoy es lo peor de los últimos años. Es incluso peor que las inundaciones de 1997», lamentó el director general de SOMDA, Hassan Isse.
De acuerdo al funcionario, muchas personas quedaron atrapadas en las inundaciones. Isse precisó que se esperaba que aumentara el número de muertos y de personas obligadas a abandonar sus hogares.
En tanto, en la vecina Kenia, la Cruz Roja informó que al menos 15 personas perdieron la vida por las inundaciones, siendo la ciudad portuaria de Mombasa y las regiones de Mandera y Wajir en el noreste las más afectadas.
Se afirmó que la inundación afectó a 241 decáreas de terreno agrícola y perecieron 1.067 animales.
La comunidad internacional debe trabajar en conjunto para abordar los desafíos derivados de las inundaciones en Somalia y Kenia.
Las inundaciones son un recordatorio de la importancia de la preparación para desastres en regiones vulnerables.
Las personas desplazadas necesitan refugio, alimentos y asistencia médica, entre otros servicios esenciales.
La gestión de desastres y la preparación son esenciales para mitigar los impactos de eventos climáticos extremos.
Las fuertes lluvias que causaron el desbordamiento del río Jubba han generado una crisis humanitaria en el suroeste de Somalia.
Que Dios los ampare
Las inundaciones en Somalia son una tragedia con la pérdida de vidas y un gran número de personas desplazadas de sus hogares.
Kenia también se ha visto afectada por las inundaciones, con la ciudad de Mombasa y las regiones de Mandera y Wajir siendo las más impactadas.