Luis Alfredo Garavito, violador y asesino de más de 130 niños en Colombia, Ecuador y Venezuela, falleció este jueves en una clínica del municipio de Valledupar, capital del departamento colombiano del Cesar, según medios locales citando un informe del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec).
El criminal padecía cáncer desde hace algunos años, pero fue hace poco que su enfermedad se hizo pública, gracias a los detalles revelados en los libros ‘El reflejo de la Bestia’ y ‘Tras la sombra de Garavito’.
Su estado de salud empeoró en los últimos meses y murió a la edad de 66 años en la Clínica Santo Tomás del Caribe.
Fue detenido en abril de 1999 y posteriormente confesó haber asesinado al menos a 138 niños, aunque se sospecha que la cifra ascendería a 194 e incluso algunos hablan de más de 200.
Cada una de sus atrocidades cometidas contra menores de edad fueron perpetradas entre 1980 y 1999. Para septiembre de 2002 ya había ingresado en la cárcel de máxima seguridad La Tramacúa.
Originalmente, Garavito fue condenado en 2001 a 1.853 años y 9 días de prisión, pero al final la pena fue rebajada por inviable. Así, las autoridades ordenaron 40 años de cárcel por los delitos de acto sexual violento, homicidio, acceso carnal violento, secuestro simple e incendio culposo. De esa sentencia, había cumplido las tres quintas partes, es decir, 24 años.