El ministro de Defensa de Corea del Sur, Kim Yong-hyun, presentó su renuncia y pidió disculpas públicas por su papel en la imposición de la reciente ley marcial.
En su declaración, asumió plena responsabilidad por los acontecimientos vinculados al estado de excepción y lamentó la confusión generada entre los ciudadanos.
Según informes, Kim habría recomendado directamente al presidente Yoon Suk-yeol que decretara la ley marcial, medida que fue bloqueada rápidamente por la Asamblea Nacional tras generar disturbios en el país.
A pesar de su dimisión, el ministro aseguró que las Fuerzas Armadas seguirán trabajando para garantizar la defensa y la seguridad nacional.
La ley marcial fue decretada por Yoon el martes, justificándola como un acto necesario para proteger el orden constitucional frente a presuntas actividades antiestatales. Sin embargo, la presión política y social lo obligó a anunciar el levantamiento de la medida este miércoles, 4 de diciembre.
¡Increíble! La ley marcial en pleno siglo XXI, ¿qué nos espera?
¿Quién asesora a estos políticos? ¡Menuda decisión!
Es lamentable que tengamos que llegar a estos extremos.
¿Renunciará también el presidente por su parte en esto?
La confusión que provocó esta medida es impensable. ¡Qué vergüenza!
Este tipo de decisiones solo generan más caos y desconfianza.
¿A qué estamos jugando? ¿Es esto democracia o autoritarismo disfrazado?
Esta renuncia no basta, hace falta más transparencia en su gestión.
¿Y qué pasa con las consecuencias para los afectados por la ley marcial?
La política de Corea del Sur cada vez más parecida a regímenes autoritarios.