En Ecuador la delincuencia organizada ha penetrado en instituciones públicas de todo nivel, a través del caso Metastasis la justicia ecuatoriana desmanteló una red vinculada a una estructura criminal en la cual están involucrados jueces, policías, guías penitenciarios, abogados, exjueces, alcaldes y hasta exasambleístas.
La delincuencia organizada ha penetrado en al menos media docena de instituciones estatales en las cuales figuran la Corte Nacional de Justicia (CNJ), el Consejo de la Judicatura (CJ), el Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad y a Adolescentes Infractores (SNAI), la Policía Nacional, la Asamblea Nacional y los gobiernos locales, de acuerdo a las investigaciones de la Fiscalía General del Estado (FGE).
En el denominado caso Metástasis, la Fiscalía detuvo a 31 personas y asegura que todas ellas habrían formado una red criminal cuyo objetivo era evadir a la justicia, conseguir impunidad y libertad para personas procesadas o sentenciadas.
La investigación se inició tras la muerte del narcotraficante Leandro Norero Tigua, quien fue asesinado en el Centro de Rehabilitación Social de Cotopaxi, en octubre de 2022.
Las diligencias para determinar las causas de su muerte llevaron a la Fiscalía y Policía a analizar el contenido de sus teléfonos celulares, en los que se encontraron chats que daban cuenta de las relaciones, negociaciones, entrega de sobornos y manipulación del sistema de justicia y de algunos de sus operadores.
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