El presidente venezolano, Nicolás Maduro, declaró el viernes que el reciente ataque contra el sistema eléctrico del país estuvo dirigido específicamente a la Central Hidroeléctrica Simón Bolívar, conocida como Guri, con la intención de dejarla fuera de funcionamiento de manera permanente.
«Según los especialistas de más alto nivel que están allá, el ataque que hicieron, cómo lo planificaron, la falla que programaron y la magnitud de lo que generaron, se podría calificar como ‘el papá y la mamá’ de todos los ataques que se han hecho contra Guri, con un objetivo: liquidar Guri», afirmó Maduro durante una alocución desde el Palacio de Miraflores.
Aunque evitó entrar en detalles sobre la investigación en curso, el mandatario aseguró que ya se han identificado los «mecanismos» empleados en la operación de sabotaje, los cuales difieren de los utilizados en los apagones masivos de 2019.
«A esta hora que les estoy hablando, tenemos determinados los mecanismos que fueron utilizados en Guri, dentro de Guri y en las cercanías de Guri. No digo más porque está en pleno proceso la investigación, para […] lograr la justicia en este caso», afirmó Maduro.
Maduro también mencionó la existencia de una «sala de guerra» ubicada en Estados Unidos, la cual estaría detrás del ataque, con el apoyo de sectores extremistas de la oposición venezolana y grupos como Anonymous. El pasado 7 de agosto, el grupo de ‘hackers’ había advertido a la población venezolana de un posible ataque al sistema eléctrico.
«Es un ataque alevoso, lleno de venganza, lleno de odio, que proviene de las corrientes fascistas que se han apoderado de los sectores políticos que pretendieron ser oposición política y que el pueblo ya identifica con claridad», concluyó Maduro.