El primer ministro ucraniano, Denís Shmygal, anunció este martes que Ucrania ha recibido un primer tramo de $1,000 millones provenientes de los activos rusos congelados por Estados Unidos.
Este monto forma parte de los $20,000 millones previstos en el marco de la iniciativa del G7, destinada a apoyar a Ucrania en medio del conflicto con Rusia.
“Se trata del primer tramo de los $20,000 millones previstos, que Estados Unidos está dispuesto a asignar mediante el uso de activos rusos congelados”, indicó Shmygal en su canal de Telegram, aunque no precisó cuándo se transferirá el resto de los fondos.
Esta asignación marca un hito en el uso de activos rusos incautados para fines de asistencia económica y militar a Ucrania, en línea con los compromisos asumidos por las naciones del G7. La medida busca mitigar los efectos del conflicto en la economía ucraniana y reforzar su capacidad de recuperación.
Sin embargo, el uso de estos activos ha generado controversias legales y diplomáticas, ya que Rusia ha denunciado que esta acción viola los principios del derecho internacional. La administración estadounidense y sus aliados defienden la medida como parte de su estrategia para sancionar a Moscú y respaldar a Kiev.
Cada centavo cuenta para nuestra resistencia
Es un golpe a Rusia y un alivio para Ucrania
Gracias a nuestros aliados, seguimos de pie
Esto debería usarse para reconstruir nuestras ciudades
Rusia puede quejarse, pero es lo justo.
Que no solo sea dinero, también necesitamos más apoyo militar
Seguimos luchando por nuestra libertad y cada ayuda es bienvenida
Putin no esperaba esto; la justicia tarda, pero llega
Este dinero debe ser transparente, sin corrupción
Un paso más hacia nuestra victoria final