Israel comenzó a retirar sus tropas del sur del Líbano al expirar el plazo del alto el fuego con Hezbolá. Sin embargo, decidió mantener cinco posiciones estratégicas en la frontera, lo que ha generado tensiones con el gobierno libanés.
Beirut considera que cualquier presencia israelí en su territorio es una ocupación y ha advertido que recurrirá al Consejo de Seguridad de la ONU si no se completa la retirada.
El acuerdo de alto el fuego, mediado por Estados Unidos y Francia, establecía que el ejército libanés y las fuerzas de paz de la ONU debían tomar el control del sur del país tras la salida de Israel.
Mientras tanto, Hezbolá se comprometía a replegarse al norte del río Litani y desmantelar su infraestructura militar en la zona. Pese a esto, la negativa de Israel a retirarse por completo ha generado dudas sobre la estabilidad del pacto.
Desde noviembre, los enfrentamientos entre Hezbolá e Israel han dejado miles de muertos y han causado una crisis humanitaria en el Líbano. Más de 100,000 personas siguen desplazadas, y la reconstrucción podría costar más de 10,000 millones de dólares.
Las autoridades libanesas han instado a los mediadores internacionales a garantizar el cumplimiento del acuerdo, mientras Israel insiste en que mantendrá sus posiciones para proteger su territorio.
Israel se retira, pero deja tropas en posiciones clave.
Eso no va a terminar bien.
Ojalá la ONU pueda mediar bien esta vez.
Eso es una tragedia humanitaria.
El mundo no puede seguir ignorando esto.
Hezbolá dice que se retira, pero Israel no confía. Esto parece un polvorín.
Qué desastre La reconstrucción costará más de 10,000 millones de dólares. ¿Quién va a pagar eso?
Israel insiste en quedarse para protegerse, pero Líbano lo ve como una provocación.