El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, reveló este lunes en un mensaje a la nación que las Fuerzas de Defensa del país (FDI) lanzarán un ataque masivo «con una fuerza nunca vista» para atacar las posiciones del movimiento Hamás.
«Estamos en el tercer día de la operación. Estamos en una operación para el hogar, una guerra para asegurar nuestra existencia, una guerra que ganaremos. […] Esta guerra fue impuesta contra nosotros por un enemigo despreciable, por bestias que celebran la matanza de mujeres, niños y ancianos», sostuvo.
Igualmente, el jefe del Ejecutivo comparó las «atrocidades» cometidas por los combatientes «no se han visto desde las atrocidades del Estado Islámico (EI)». «Siempre hemos sabido qué es Hamás. Ahora todo el mundo lo sabe. Hamás es el EI. Y derrotaremos precisamente como el mundo ilustrado derrotó al EI», prometió.
Comentando los bombardeos constantes a la Franja de Gaza por parte de la aviación hebrea, el premier indicó que esto es «solo el comienzo». «Dije que cada lugar donde se encuentre Hamás se convertirá en ruinas. Esto sucederá aún más en el futuro», agregó.
Además, el primer ministro subrayó que su Gobierno se esforzará por hacer «todo lo posible» para traer de vuelta a los ciudadanos israelíes retenidos por los combatientes de Hamás. Poco antes del mensaje de Netanyahu se reportó que los militares de Israel decidieron bombardear la Franja de Gaza incluso en casos de una potencial amenaza para los que se encuentran allí.
En otro orden, Netanyahu instó a la oposición, que lleva meses protestando en las calles contra la reforma judicial, a unirse a un Gobierno de unidad nacional «sin condiciones previas». «Tenemos una responsabilidad suprema: establecer la unidad en el pueblo. La división dentro de nosotros ha terminado. El pueblo está unido y ahora los líderes deben unirse. Hago un llamado a los líderes de la oposición para que establezcan de inmediato un gobierno de emergencia», señaló.
Netanyahu refutó también informes mediáticos en los que se afirmaba que Egipto habría advertido a Israel que el movimiento radical palestino preparaba “algo grande». En este contexto, llamó a sus compatriotas a evitar propagar «noticias falsas», según The Times of Israel.