Los ataques aéreos israelíes en el este y sur del Líbano han dejado al menos 47 muertos y 22 heridos en la región de Baalbek, según autoridades locales. También se registraron bombardeos en los suburbios del sur de Beirut, causando graves daños.
El ejército israelí afirmó que los ataques buscan debilitar la infraestructura de Hezbolá y limitar sus líneas de suministro, mientras continúan los enfrentamientos terrestres en el sur del Líbano, cerca de áreas estratégicas como Al Bayyaada y Tiro.
Hezbolá, por su parte, ha intensificado el lanzamiento de cohetes hacia el norte de Israel, con varios impactos reportados en la ciudad de Nahariya, donde una persona murió. Este conflicto, que se agudizó en octubre de 2023, ha causado hasta la fecha más de 3,500 muertos y 15,000 heridos en el Líbano.
Mientras tanto, las tropas israelíes siguen avanzando en el terreno con apoyo de artillería, consolidando posiciones clave en el sur del país.
En paralelo, el mediador estadounidense Amos Hochstein intenta lograr una tregua entre ambas partes. Durante su visita al Líbano y luego a Israel, expresó que un alto el fuego es posible, aunque persisten puntos de fricción, como el desarme de Hezbolá y el control de sus líneas de abastecimiento.
A pesar del optimismo cauteloso, los enfrentamientos siguen intensificándose, y las negociaciones enfrentan desafíos importantes.