Las autoridades sanitarias de Florencia investigan un grave brote de intoxicación alimentaria en cuatro residencias de ancianos, donde tres personas han fallecido y al menos 114 han presentado síntomas como vómitos y diarrea.
El problema se detectó el pasado domingo cuando varios residentes manifestaron malestar tras la cena. Las pesquisas iniciales señalan como posibles responsables ciertos alimentos servidos en los centros, incluyendo puré de verduras, conejo y pizza.
El Servicio de Sanidad local ha prohibido temporalmente la producción de comidas en los centros afectados y ha iniciado un análisis exhaustivo de los lotes de comida distribuidos.
Entre los productos sospechosos se encuentra un puré de zanahorias y patatas, que podría haber estado contaminado. Mientras tanto, los intoxicados, que forman parte del grupo ‘Sereni Orizzonti’, están recibiendo atención médica para evitar complicaciones mayores.
Las muertes se han confirmado en dos residencias de Settignano y una en Pelago, ambas ubicadas en la región toscana. Las autoridades italianas han reforzado los controles en otras residencias para evitar la propagación de más casos y garantizar la seguridad alimentaria en estos centros. La Fiscalía de Florencia también ha abierto una investigación para determinar si hubo negligencia en el manejo de los alimentos.