Este 12 de enero se conmemoran 15 años del terremoto de magnitud 7.2 que devastó Haití en 2010, dejando un saldo catastrófico: más de 300,000 muertos, 350,000 heridos y alrededor de 1.5 millones de personas sin hogar. Con epicentro a tan solo 15 kilómetros de Puerto Príncipe, el sismo marcó una de las mayores tragedias humanitarias de la historia moderna.
En las primeras horas, 26 réplicas mayores a 4.2 sacudieron la región, con doce de ellas superando los 5.0 grados. La infraestructura colapsó, incluyendo edificios gubernamentales como el Palacio Nacional, hospitales, escuelas e iglesias. La Catedral de Puerto Príncipe y el principal muelle del país quedaron inoperables.
El aeropuerto de Puerto Príncipe sufrió daños severos y una saturación de vuelos humanitarios, complicando la logística de ayuda internacional. Mientras tanto, el suministro de agua, electricidad y alimentos se volvió crítico, agravando la situación de los sobrevivientes.
El desastre generó una respuesta masiva de ayuda humanitaria. Países vecinos como República Dominicana y Estados Unidos, junto con organizaciones internacionales, enviaron recursos, alimentos, equipos de rescate y personal médico. Sin embargo, la reconstrucción se vio obstaculizada por problemas de coordinación y corrupción.
A la catástrofe se sumó una epidemia de cólera en 2010, atribuida a cascos azules de la ONU, que infectó a más de 520,000 personas y causó 7,000 muertes, controlándose totalmente en 2019.
Otros desastres naturales como el huracán Matthew en 2016 y otro terremoto en 2021 agravaron la vulnerabilidad del país. Hoy en día, más de 4.5 millones de haitianos enfrentan inseguridad alimentaria en un contexto de inestabilidad política y control de bandas criminales.
A pesar de la adversidad, Haití sigue luchando por superar las cicatrices de su pasado reciente. Este aniversario es un recordatorio de la importancia de fortalecer la capacidad de respuesta ante desastres y la solidaridad global para apoyar a las comunidades más afectadas.
15 años y seguimos esperando la reconstrucción que nunca llegó. ¿Dónde están esos fondos?
Triste aniversario para un país que sigue sufriendo las secuelas del terremoto y la indiferencia del mundo
Haití sigue luchando por levantarse, pero cada día parece más difícil
300,000 muertos y un pueblo que sigue esperando respuestas
Las tragedias no deben ser olvidadas
Pasan los años y Haití sigue siendo un ejemplo de cómo la ayuda humanitaria puede diluirse y no llegar a quienes más lo necesitan
El terremoto no solo destruyó infraestructuras, también las esperanzas de un pueblo entero
Este aniversario nos recuerda que el sufrimiento de Haití no termina con un terremoto
15 años después, Haití necesita una transformación profunda
No basta con enviar ayuda, hay que garantizar que se utilicen los recursos de manera efectiva para el bienestar del pueblo haitiano