Cada 30 de noviembre se conmemora el Día Internacional de la Seguridad de la Información, una fecha establecida en 1988 tras el incidente del “Gusano de Morris”, considerado el primer malware de propagación en red a nivel mundial. Este ataque cibernético afectó al 10 % de las máquinas conectadas a ARPANET, la red precursora de Internet, marcando un hito en la historia de la seguridad informática.
La Association for Computing Machinery (ACM) instituyó esta fecha para recordar la importancia de proteger la información digital y fomentar prácticas seguras frente a amenazas cibernéticas.
En la actualidad, gran parte de la información sensible de las empresas y personas se encuentra almacenada en la nube y en plataformas digitales. Esto exige un esfuerzo continuo para garantizar la protección de datos.
Por ello, muchas organizaciones aprovechan esta fecha para realizar actividades de concienciación, capacitar a su personal y mejorar sus protocolos de seguridad, reconociendo que ninguna entidad está completamente exenta de violaciones de seguridad.
El Día Internacional de la Seguridad de la Información es un recordatorio para todos: proteger nuestros datos digitales es una responsabilidad compartida.