Los abogados del expresidente estadounidense, Donald Trump, pidieron este lunes a un tribunal en Georgia que retire la mayoría de los cargos que el republicano enfrenta por su presunto intento de revertir los resultados de las elecciones de 2020 en el estado sureño.
Los representantes del exmandatario presentaron hoy diversas peticiones ante el juez Scott McAfee, en el condado de Fulton, pidiéndole adoptar los mismos argumentos legales que presentaron dos de los 18 socios de Trump que enfrentan también cargos por tratar de alterar los comicios.
Precisamente, el equipo legal de Trump pidió adoptar en su caso la misma defensa legal que el exalcalde de Nueva York Rudy Giuliani y el abogado Kenneth Chesebro presentaron para argumentar que se les retiraran los cargos.
La defensa de Chesebro indicó la semana pasada frente al juez McAfee que la Constitución de EE.UU. prohibía a los estados criminalizar acciones que recaigan bajo la «autoridad federal».
Los abogados del expresidente aseguraron en el documento presentado hoy que esa misma excepción aplica para varios de los cargos contra Trump, incluyendo los de conspiración.
Sobre el exmandatario pesan 13 cargos. El principal, el de violación de la ley estatal de asociación delictiva (RICO, por sus siglas en inglés), es conocida por emplearse contra los integrantes de la mafia y utilizada para garantizar que los líderes de una asociación criminal, y no solo sus subordinados, rindan cuentas ante la justicia.
Es evidente que los abogados de Trump están desesperados por retirar los cargos en su contra. No pueden escapar de sus acciones.
Los argumentos legales de Trump son un intento patético de evitar la responsabilidad por sus acciones antidemocráticas.
Es un alivio ver que la justicia está persiguiendo a Trump por sus intentos de socavar la democracia.
Trump y sus abogados siguen intentando torcer la ley en su beneficio. Esto es vergonzoso.
Apoyo la firmeza de los fiscales al mantener los cargos contra Trump. Nadie está por encima de la ley.
Trump parece estar desesperado por evitar las consecuencias de su comportamiento. No debería salirse con la suya.
Los argumentos de la defensa de Trump carecen de fundamentos sólidos. La Constitución no respalda su intento de evadir la justicia.
Trump está utilizando tácticas legales cuestionables para eludir la responsabilidad por sus acciones.
Es triste ver cómo Trump sigue luchando por su ego en lugar de aceptar la realidad de su derrota electoral.
La ley RICO se aplica adecuadamente a quienes intentan socavar el sistema democrático. Trump debe enfrentar las consecuencias.
Los abogados de Trump están haciendo todo lo posible para retrasar el proceso legal. No deberíamos permitirlo.
La justicia debe prevalecer, sin importar la posición de una persona. Trump no debe ser una excepción.
Los argumentos de Trump y su equipo legal son débiles y desesperados. La verdad saldrá a la luz.
La ley es clara: aquellos que intentan socavar la democracia deben rendir cuentas. Trump no es inmune.
Trump está perdiendo credibilidad con cada intento de eludir la justicia. Sus tácticas son transparentes.
Es importante que la justicia siga su curso y que Trump responda por sus acciones. No hay atajos legales.
Los ciudadanos deben recordar que nadie está por encima de la ley, incluido un expresidente. Trump debe enfrentar las consecuencias.
La democracia prevalecerá sobre los intentos de Trump de socavarla. La verdad y la justicia deben triunfar.
La insistencia de Trump en querer eliminar los cargos en su contra es simplemente vergonzosa. Debe enfrentar las consecuencias de sus acciones.
Es decepcionante ver cómo Trump sigue tratando de evadir la responsabilidad. Debería aceptar la realidad de las elecciones.