El presidente de EE.UU., Donald Trump, firmó este sábado tres órdenes ejecutivas que imponen aranceles del 25 % a bienes de México y Canadá (exceptuando el petróleo canadiense, que tendrá un 10 %) y del 10 % a los productos chinos.
La medida, anunciada desde su residencia en Mar-a-Lago, es parte de su política de presión comercial y migratoria, lo que podría generar represalias y tensiones económicas.
Trump justificó los aranceles alegando que Canadá y México no han controlado el tráfico de drogas ni la migración ilegal, mientras que acusó a los carteles mexicanos de estar aliados con el gobierno de ese país.
La Casa Blanca indicó que los gravámenes estarán vigentes hasta que ambos países cooperen en seguridad fronteriza. China, por su parte, aún no ha respondido oficialmente.
Desde México, la presidenta Claudia Sheinbaum minimizó el impacto de la medida, asegurando que su país tiene planes alternativos.
En Canadá, el primer ministro Justin Trudeau advirtió que su gobierno dará una respuesta firme y proporcionada, la cual se espera sea anunciada en las próximas horas. Trump ya advirtió que, si hay represalias, los aranceles podrían aumentar aún más.