La decisión de un museo alemán de prohibir a la gente blanca la entrada a una pequeña sección de la exposición «Esto es colonialismo», fue calificada en redes sociales de «escándalo racista».
Agitación policial y mediática frente al museo Zeche Zollern de Dortmund, epicentro de lo que las redes sociales califican de escándalo racista.
La culpa es de la exposición «Esto es colonialismo» y de la decisión del museo de prohibir a la gente blanca la entrada a una pequeña sección y sólo durante unas horas. El objetivo no es discriminar, defiende la institución, sino reservar un espacio seguro de reflexión para los no blancos.
«Se trata de un grupo de afectados, así que la petición es que los afectados también puedan ser para sí mismos y hablar entre ellos. Ese es el planteamiento, hablar de un tema para uno mismo y con uno mismo y luego estar libre de otras tesis», dice Barbara Rüschoff-Parzinger, del departamento de Cultura y la asociación regional de Westfalia-Lippe.