El Ministerio de Defensa ruso anunció la liberación de Velíkaya Novosiolka, un bastión estratégico y logístico importante de las fuerzas ucranianas en el sur de la República Popular de Donetsk. Este avance marca la pérdida del último punto defensivo significativo de Ucrania en esta región, según informes militares rusos.
Velíkaya Novosiolka se encontraba cerca de la frontera entre Donetsk, Zaporozhie y Dnepropetrovsk, y junto con Kurájovo y Ugledar, constituía una posición clave para el Ejército ucraniano. La ofensiva incluyó el uso de sistemas de lanzacohetes múltiples TOS-1 con misiles termobáricos para destruir defensas y refugios ucranianos.
La localidad es considerada por el Ministerio de Defensa ruso como «la última línea defensiva grande y bien preparada» de Ucrania en el sur de Donetsk. Este avance podría tener implicaciones estratégicas significativas en el conflicto.