El general retirado colombiano Mario Montoya Uribe, acusado por la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) de crímenes de guerra y lesa humanidad, ha sido sancionado por Estados Unidos con la prohibición de entrada a su territorio, extendida también a su familia.
El Departamento de Estado estadounidense argumentó que existen “pruebas creíbles” que vinculan a Montoya con ejecuciones extrajudiciales, conocidas como “falsos positivos”, durante su mando en el Ejército colombiano. Estas ejecuciones consistieron en el asesinato de civiles reportados falsamente como combatientes muertos en enfrentamientos, un crimen que otorgaba beneficios a los perpetradores.
Según el fallo de la JEP, Montoya impartió órdenes explícitas para medir el éxito de las operaciones militares en términos de “litros” o “ríos de sangre”, lo que presionó a los militares bajo su mando a cometer al menos 130 ejecuciones extrajudiciales entre 2002 y 2003 en Antioquia.
Entre las víctimas documentadas se encuentran menores de edad, mujeres y personas con discapacidad, lo que agrava la magnitud de estos crímenes. La región de Antioquia se posiciona como la más afectada por los ‘falsos positivos’, concentrando el 25,19 % de las 6.402 víctimas identificadas a nivel nacional entre 2002 y 2008.
Este caso representa uno de los capítulos más oscuros del conflicto armado colombiano y ha generado un fuerte rechazo internacional.
Con esta medida, Estados Unidos busca condenar públicamente las violaciones de derechos humanos cometidas por Montoya y resaltar su compromiso con la justicia y la reparación de las víctimas.
La sanción refuerza la presión sobre las autoridades colombianas para avanzar en los procesos judiciales en curso y garantizar que los responsables rindan cuentas por sus actos.
increíble como un alto mando militar terminó manchando su legado con estos crímenes
los falsos positivos son una herida que sigue abierta en Colombia
Estados Unidos marcando su posición con esta prohibición a Montoya y su familia
qué vergüenza que un líder militar promoviera “ríos de sangre” como métrica de éxito
pensar que entre las víctimas hay niños y personas vulnerables es desgarrador
Antioquia cargó con el mayor peso de esta atrocidad según las cifras presentadas
ojalá la justicia colombiana no deje estos casos en el aire como tantos otros
la JEP ha hecho un trabajo importante destapando la verdad de este capítulo oscuro
qué importante que se sigan documentando estos hechos para que no se repitan
es difícil entender cómo alguien en el Ejército pudo justificar estos crímenes
Pero claro, a Mario Montoya le dieron la sanción en EE.UU., mientras aquí todavía le aplauden como si fuera un héroe. ¡A ver cuándo le dan una por su historia en Colombia!
Ahora resulta que EE.UU. se acuerda de Mario Montoya. ¿Qué tal si empezamos a rendir cuentas por los crímenes de guerra también aquí? #RevoluciónDeLaMemoria
Al exgeneral Montoya no lo detuvieron ni lo juzgaron aquí, pero ahora que EE.UU. le pone la sanción, todo el mundo está pendiente. ¡Cuándo va a caer la justicia en Colombia, entonces?
Lo de Montoya ya es una novela, pero al parecer los países siguen mirando para otro lado mientras los criminales siguen gozando de impunidad. ¡El colmo!
Sanción de EE.UU. al exgeneral Montoya… ¿Será que esto es el principio de una verdadera investigación o solo otra medida simbólica para quedar bien con la opinión pública?
Si Montoya va a pagar, que paguen todos los demás que han hecho lo mismo o peor, que no sean selectivos con las sanciones, ¡la justicia debe ser para todos!
Oye, Montoya no solo está acusado de crímenes de guerra, sino que además fue pieza clave en una época donde la violencia era el pan de cada día. ¿Qué sigue después de esta sanción?
EE.UU. sancionando a Mario Montoya, pero mientras tanto en Colombia el tema se sigue obviando. ¡Parece que algunos aún se benefician de la impunidad!
Esto no debería quedar solo en sanciones externas. Necesitamos un juicio que lo ponga frente a la justicia, no solo que lo sancionen en papeles que no cambian nada en el terreno.