EE. UU. revocó las licencias de petroleras extranjeras para operar en Venezuela, afectando a empresas como la francesa Maurel & Prom, la española Repsol y la estadounidense Chevron. La medida busca presionar al gobierno de Nicolás Maduro, a quien Washington no reconoce como presidente.
La administración Trump también impuso un arancel del 25% a los países que compren petróleo venezolano. Venezuela, que actualmente produce un millón de barriles diarios, pierde importantes ingresos con la salida de Chevron, que aportaba 220,000 barriles.
Maduro ha insistido en que el país seguirá abierto a inversiones extranjeras sin necesidad de licencias de EE. UU. La medida aumenta la incertidumbre en la economía venezolana, que ya enfrenta una producción petrolera debilitada.
EE. UU. revoca licencias petroleras en Venezuela y golpea a Chevron, Repsol y Maurel & Prom
Washington intensifica sanciones contra Maduro con restricciones al sector petrolero
Producción venezolana en jaque: pierde 220,000 barriles diarios tras salida de Chevron
Trump impone arancel del 25% a países que compren crudo venezolano
Maduro desafía a EE. UU.: «Seguiremos abiertos a inversiones sin licencias extranjeras»
Siempre la misma vaina: EE. UU. apretando con sanciones y el pueblo venezolano pagando los platos rotos. ¿Y al final qué? Maduro sigue ahí como si nada.
Quitarle las licencias a esas empresas solo va a hacer que la crisis en Venezuela se ponga peor. La gente necesita trabajo y petróleo es lo único que aún les da algo de dinero.
Maduro habla bonito de inversión extranjera, pero sin Chevron y compañía, ¿quién se va a arriesgar a meter dinero allá? Esto solo hunde más la economía venezolana.