El líder opositor venezolano, Edmundo González Urrutia, suspendió este martes el resto de su agenda en Estados Unidos luego de que su yerno, Rafael Tudares, fuera secuestrado en Caracas mientras llevaba a sus hijos al colegio por el inicio del año escolar.
En un comunicado difundido en redes sociales, González detalló que hombres encapuchados, vestidos de negro, interceptaron el vehículo de Tudares, lo obligaron a descender y lo subieron a una camioneta color dorado con placa AA54E2C. Hasta el momento, su paradero es desconocido.
Tras conocerse el incidente, González canceló una reunión prevista con el senador demócrata Dick Durbin y otros legisladores estadounidenses. En su lugar, la delegación del opositor viajará a Panamá para continuar su gira internacional en busca de apoyos de cara a la controvertida investidura presidencial del próximo 10 de enero.
González, quien se declara ganador de las elecciones presidenciales del 28 de julio, había sostenido recientemente un encuentro con el presidente saliente de Estados Unidos, Joe Biden, y con legisladores republicanos como el senador Rick Scott y el congresista Mario Díaz-Balart. Estos últimos reafirmaron su respaldo al opositor y advirtieron que el futuro gobierno de Donald Trump tomará medidas contundentes contra quienes repriman al pueblo venezolano.
En medio de la crisis, González confirmó que se estudia la posibilidad de que nueve expresidentes latinoamericanos lo acompañen en su viaje de regreso a Venezuela, donde planea jurar como presidente el 10 de enero, a pesar de una orden de detención en su contra y una recompensa de 100,000 dólares ofrecida por su captura.
Mientras tanto, Nicolás Maduro también ha reafirmado su intención de asumir el poder ese mismo día, intensificando el enfrentamiento político que atraviesa el país sudamericano.