República Dominicana.- La Segunda Sala Penal del Distrito Nacional acogió la solicitud del Ministerio Público y condenó este lunes a cinco años de prisión al abogado Johnny Portorreal Reyes y a dos años de reclusión a Miguelina Santana, por la estafa a 283 personas de apellido Rosario, a las que prometió recuperar una supuesta herencia de 13 trillones de euros que tenían depositada en un banco en el extranjero por un pariente lejano apellido Rosario, lo que nunca cumplió.
La magistrada Clara Luz Almonte también condenó a Portorreal Reyes al pago de una multa de 50 salarios mínimos, mientras descargó de la acusación a Miguel de Oleo Montero, a quien el Ministerio Público también acusó de formar parte del accionar de esta red de estafa.
El Ministerio Publico demostró ante el tribunal la culpabilidad de Portorreal Reyes y de Santana por los delitos de asociación de malhechores y la estafa.
La acusación instrumentada por la Fiscalía del Distrito Nacional, representada por los fiscales litigantes Laura Vargas y Rafael Reyes, logró establecer que el abogado Portorreal y Miguelina Gómez Santana se asociaron, junto a otras personas, para estafar con RD$16 millones de pesos a cientos de personas de apellido Rosario, a quienes cobraron altas sumas de dinero, que van desde 15 mil hasta 24 mil pesos por persona, con la promesa de hacer las diligencias del supuesto cobro de una presunta herencia millonaria.
Se recuerda que el órgano de justicia presentó un expediente con más de 600 pruebas testimoniales y documentales que compromete la responsabilidad penal de Portorreal Reyes y compartes.
La imputación del Ministerio Publico establece que el grupo de procesados solicitaba altas sumas de dinero a las víctimas de apellido Rosario, alegando tener la información falsa de que el dinero de la supuesta herencia había sido transferido al Banco Central y posteriormente al Banco de Reservas, desde el Banco Santander, de España, y el Banco Zúrich, de Suiza.
Los investigadores judiciales presentaron evidencias con las que sustentaron la acusación, de que los encartados aseguraban a sus víctimas que los montos que requerían serían cobrados a través de la empresa “La Central del Derecho LPR, SRL”, a los fines de realizar trámites para su registro como herederos de sus familiares antepasados fallecidos, señores Celedonio Rosario y María del Rosario.
Según consta en el expediente, el pago de los estafados por Portorreal y compartes, consistía en desembolsos que eran entregados a Gómez Santana y Portorreal, a quienes les cedían el derecho de un poder Cuota Litis, con el que se acordaba el pago de los honorarios, utilizado en una entidad bancaria al momento de retirar los fondos que iban a ser presuntamente depositados.
Mientras que Miguel D Òleo Montero e Hilario Amparo de la Cruz, exonerados en el proceso, fueron sindicados como las personas que se reunían con la intención de captar a los supuestos herederos de la familia Rosario, reclamando el dinero para financiarles sus viajes o las diligencias en Europa, donde estarían las sedes de los supuestos bancos internacionales donde aseguraban estaba depositada la presunta herencia millonaria.
La lectura de la condena fue fijada para el próximo martes 9 de abril del presente año.
¡Puede ser, pero también podemos considerar que hay pruebas en su contra! No nos precipitemos en defender a alguien solo por su profesión. La justicia debe prevalecer, sea abogado o no. Nunca se sabe lo que puede haber detrás de un aparente malentendido.
¡No me creo nada de esa noticia! Seguro hay más detrás de todo esto.
¿Y si en realidad fue un malentendido? ¡Inocente hasta que se demuestre lo contrario!
¡Pero qué locura! ¿Qué opinan ustedes, merecía más o menos tiempo en prisión?
¡No lo creo! Johnny Portorreal ha estado involucrado en demasiadas actividades ilegales para ser considerado una víctima inocente. Siempre ha estado en el lado equivocado de la ley, ¡así que no me sorprendería en absoluto si estuviera metido en una trampa!
¿Y si en realidad fue un acto de justicia divina? No todo es lo que parece.
No confundamos justicia divina con crueldad humana. No hay justificación para la violencia, independientemente de las circunstancias. Justificar un acto atroz como un acto divino es peligroso y despiadado. Debemos buscar soluciones pacíficas y empáticas en lugar de excusas irracionales.
¿Estafa o justicia? Quizás Portorreal solo estaba ayudando a equilibrar el karma.
¡Qué locura! ¿Realmente merece cinco años por eso? Me parece exagerado.
¿Estafa o simple error? Todos merecen una segunda oportunidad. #JusticiaParaPortorreal
Todos merecen una segunda oportunidad, pero no podemos ignorar los hechos. Si hubo estafa, debe rendir cuentas. La justicia no puede ser ciega ante posibles crímenes. #JusticiaImparcial
¡Esto es una locura! ¿Por qué solo cinco años para semejante estafa? ¡Injusticia total!
Eso cuarto están ahí, el estado se quiere quedar co el
Bueno, que lo obliguen a devolver esos 16 millones
¡Qué locura! ¿Y si en realidad el abogado Portorreal era un héroe encubierto?
¿Cómo puede ser justo que solo le den cinco años por eso? ¡Debería ser más!
¡Estoy de acuerdo contigo! Cinco años no parece suficiente para el daño causado. La justicia a veces parece estar del lado equivocado. Esperemos que en el futuro se apliquen penas más severas para estos casos. ¡Un abrazo!
¡Totalmente de acuerdo! Los abogados deberían tener una mayor regulación para proteger a los clientes de posibles estafas. Es fundamental garantizar la transparencia y la ética en el ejercicio de la abogacía. ¡No podemos permitir que se abuse de la confianza de las personas en momentos tan críticos!
¿Y si en realidad fue un malentendido? ¡No juzguemos sin conocer la verdad!
¡Exactamente! Antes de señalar con el dedo, deberíamos escuchar todas las versiones de la historia. No caigamos en juicios apresurados, la verdad siempre tiene dos caras. Tal vez haya más detrás de este supuesto malentendido. ¡Mantengamos la mente abierta!
¡Vaya teoría! Si fue una estrategia de marketing, desde luego ha generado mucha controversia. Aunque, ¿no crees que sería arriesgado utilizar un caso tan delicado con ese propósito? Preferiría pensar que la intención era genuina y no meramente promocional. ¡Interesante debate!
¿Y si en realidad fue un malentendido? Quizás merece una segunda oportunidad.
¡No se merece una segunda oportunidad! Si hubo un malentendido, es responsabilidad de la persona aclararlo. No hay excusas para comportamientos inaceptables. Mejor seguir adelante y aprender de los errores. ¡No hay tiempo que perder con quien no valora una primera oportunidad!
¿Y si en realidad el abogado Portorreal es inocente? ¡Conspiración de los Rosario!
¿Y si en realidad fue un malentendido? ¿Tendrá Johnny Portorreal alguna coartada creíble?