Cada 14 de febrero se conmemora el Día Mundial de las Cardiopatías Congénitas, una fecha dedicada a la concienciación sobre esta enfermedad y la importancia de su diagnóstico temprano.
Se estima que miles de niños nacen cada año con algún tipo de cardiopatía congénita, un trastorno del desarrollo del corazón que puede requerir cirugías y tratamientos desde la infancia. La detección temprana y el avance de la medicina han permitido mejorar la calidad de vida de muchos pacientes, aumentando su esperanza de vida.
Las causas de las cardiopatías congénitas no siempre son claras, pero se han identificado factores de riesgo como infecciones durante el embarazo, diabetes materna, consumo de sustancias nocivas y factores genéticos, como el síndrome de Down.
La prevención se enfoca en controles médicos regulares, evitar sustancias tóxicas durante la gestación y mantener una alimentación saludable. A pesar del aumento de casos, la tecnología y la ciencia han logrado avances significativos en su tratamiento.
Para conmemorar este día, diversas organizaciones y fundaciones realizan actividades para sensibilizar a la población, como campañas informativas, caminatas y encuentros con pacientes.