Despliegan más de 3.000 militares en Brasil para combatir el tráfico de drogas

El Gobierno brasileño desplegó este lunes a 3.700 militares de la Fuerza Aérea, Ejército y Marina en puertos y aeropuertos de Río de Janeiro y São Paulo, para luchar contra el tráfico de armas y drogas de las facciones criminales.

Esa acción fue tomada por el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, ante la crisis de seguridad pública que se ha registrado en las últimas semanas en varios estados del país.

Lula firmó la semana pasada el decreto de Garantía de la Ley y el Orden (un instrumento legal que permite movilizar a los militares), que concluirá el 3 de mayo de 2024.

Los militares que trabajarán conjuntamente con la Policía vigilarán los puertos de Itaguaí, Río de Janeiro y Santos, así como los aeropuertos de Guarulhos y Galeão en Sao Paulo y Río de Janeiro, respectivamente.

También, la Marina brasileña y la Policía Federal se desplegarán en las bahías de Guanabara y Sepetiba, en el puerto de Santos y en el lago de Itaipú.

La operación estipula, además, el reforzamiento aéreo y terrestre de todas las fronteras del país, con especial énfasis en los límites de los estados de Paraná, Mato Grosso y Mato Grosso do Sul.

«Este decreto establece la creación de una operación integrada para combatir el crimen organizado», indicó Lula.

El operativo abarca la ampliación de «acciones de inteligencia y operaciones de detención e incautación de bienes pertenecientes a las pandillas, especialmente en Río de Janeiro», así como investigaciones «con el objetivo de debilitar el poder financiero» de las bandas del crimen organizado.

El mes pasado, en Río de Janeiro se vivieron momentos de terror en el mayor ataque al transporte público de la historia de la ciudad carioca, cuando un grupo de milicianos quemó 35 autobuses y un tren.

Igualmente, el estado de Bahía ha sido escenario de episodios de gran violencia por la guerra entre las facciones y los enfrentamientos con la Policía.