El conflicto en Gaza se intensifica con la muerte de al menos 42 palestinos en ataques aéreos israelíes registrados en diversas áreas de la Franja.
Según fuentes médicas, los bombardeos alcanzaron viviendas y objetivos en Beit Lahiya y Khan Younis, dejando un saldo devastador, incluidos varios niños y mujeres.
Además, tanques israelíes avanzaron en el norte y sur del enclave, bloqueando el acceso de ambulancias y atrapando a familias en sus hogares, según informaron autoridades locales y hospitales de la zona.
La situación humanitaria se agrava mientras más de dos millones de personas enfrentan condiciones críticas.
Naciones Unidas advierte sobre una inminente hambruna y la escasez de agua potable, mientras que muchas familias sobreviven en condiciones deplorables. Al-Jazeera reportó que civiles han pasado días consumiendo solo dátiles y agua, y hay informes de personas enterradas bajo escombros sin posibilidad de rescate debido al continuo fuego israelí.
En el ámbito político, las negociaciones para un alto el fuego siguen siendo inciertas. Aunque un acuerdo reciente entre Israel y Hezbollah en Líbano ha generado esperanzas, la posibilidad de un cese al fuego entre Israel y Hamás sigue sin avances concretos.
Mientras tanto, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, señaló que las condiciones para liberar a los cautivos israelíes en Gaza han mejorado, pero la violencia continúa dejando un saldo devastador de más de 44,000 palestinos muertos desde octubre de 2023.
Las ambulancias no pueden llegar a los heridos por la brutalidad de los enfrentamientos.