El conflicto en el este de la República Democrática del Congo (RDC) escaló tras el avance del grupo rebelde M23 hacia la estratégica ciudad de Goma, respaldado presuntamente por Ruanda.
En respuesta, manifestantes en Kinshasa atacaron embajadas de Ruanda, Francia, Bélgica y Estados Unidos, exigiendo intervención internacional para detener a los insurgentes. Los disturbios dejaron saqueos e incendios en varias legaciones diplomáticas.
El grupo rebelde M23 afirmó haber tomado Goma, lo que marcaría un punto clave en el control de rutas comerciales en la región rica en minerales. La situación en el terreno sigue siendo tensa, con miles de desplazados, hospitales colapsados y servicios básicos cortados. La ONU denunció la muerte de tres soldados sudafricanos y 17 militares extranjeros durante los combates.
Ruanda ha sido señalada por apoyar al M23, mientras la comunidad internacional presiona para un reinicio de las negociaciones de paz entre Congo y Ruanda.
En medio de críticas por su manejo de la crisis, el presidente Félix Tshisekedi prometió dirigirse a la nación para delinear una estrategia. La ONU también prevé una reunión urgente para abordar esta emergencia humanitaria.
Publicaciones relacionadas:
Naufragio de ferry sobrecargado cobra más de 80 vidas en el Congo
Caso Ayotzinapa: Manifestantes exigen justicia y atacan a la Secretaría de Gobernación en México
La ONU pide acción urgente ante la crisis humanitaria en Sudán
Hutíes atacan buques y destructores estadounidenses en el mar Rojo y golfo de Adén
Los hutíes atacan destructor de EE.UU. en el mar Arábigo
Me resulta impactante ver cómo la lucha por el control de recursos en esta región genera tanta inestabilidad y sufrimiento. No puedo dejar de pensar en las miles de personas desplazadas que enfrentan condiciones extremas, con hospitales colapsados y servicios básicos inexistentes
Cuando leo sobre el supuesto apoyo de Ruanda al grupo rebelde M23, no puedo evitar reflexionar sobre las tensiones históricas entre ambos países. Me preocupa que estas acusaciones compliquen aún más las posibilidades de alcanzar una paz sostenible
Al enterarme de los ataques a embajadas extranjeras en Kinshasa, siento que es una muestra clara de la frustración de la población. Sin embargo, pienso que estas acciones podrían dificultar que la comunidad internacional brinde el apoyo necesario para resolver esta crisis.
Eso está candente en Congo men las embajadas cayendo a fuego
Si Ruanda está metido ahí esto no va a acabar fácil
Los manifestantes tirando todo a su paso los pobres embajadores no tienen culpa
Goma cayendo en manos del M23 y eso es un lío internacional
Congo está ardiendo y las potencias no dicen ni pío
Esos rebeldes lo que están buscando es controlar la zona minera nada nuevo
La ONU se queja pero no hace nada pa’ resolver esa vaina
Félix Tshisekedi dijo que va a hablar con el pueblo pero eso no soluciona nada
Los hospitales en Congo a punto de reventar con tanta gente herida
Ojalá lleguen las negociaciones porque esto se está poniendo del diablo