Las autoridades del Gobierno de los talibanes, empresas de construcción y otros ciudadanos trabajan en conjunto y contra el reloj desde hace más de 40 horas para rescatar con vida a un niño de seis años que cayó a un pozo de agua en el este de Afganistán, aunque la escasez de recursos mecánicos dificultan la operación.
Las labores de rescate han llegado ya a unos tres metros de distancia, pero desafortunadamente una piedra grande obstruye el camino para rescatar al niño”, dijo a EFE Zabiullah Jawhar, portavoz del jefe de policía de la provincia de Zabul, donde ocurrió el accidente.
Se informó que para avanzar en la operaciones se requiere de una máquina perforadora, de la que los operativos no disponen en este momento, está máquina ha sido solicitada a la vecina provincia de Kandahar y “está en camino”, aseguró el portavoz policial.
Desesperados por el posible deterioro de la salud de Haider, los residentes han pedido a las autoridades que envíen de manera urgente maquinaria avanzada al área.
Los comentarios en la redes sociales y las preocupaciones no se hace esperar, comparan este accidente con el caso del niño Rayan, rescatado sin vida tras casi 100 horas en el fondo de un pozo en Marruecos, y lamentan que la atención mediática internacional no sea la misma para este joven afgano.