La deforestación en Colombia repuntó en 2024 tras haber alcanzado mínimos históricos en 2023. Durante el año pasado se perdieron 79,256 hectáreas, mientras que en 2024 la cifra ascendió a 107,000 hectáreas, lo que representa un aumento del 35%. Aunque este incremento no es positivo, el gobierno destaca que sigue siendo la segunda cifra más baja registrada históricamente, lo que pone en perspectiva los esfuerzos ambientalistas del país.
La ministra de Ambiente, Susana Muhamad, explicó que el repunte se concentra en cinco puntos estratégicos, entre los que destacan los parques nacionales de La Macarena y Tinigua en el sur.
Entre las principales causas del aumento se encuentran el acaparamiento de tierras por grandes operaciones de capital, la expansión de monocultivos de palma de aceite y la plantación de hoja de coca, además de la interferencia de disidencias que impiden la llegada del Estado a trabajar con las comunidades locales.
Colombia ha intensificado sus esfuerzos internacionales en materia ambiental, siendo sede de la COP16 sobre biodiversidad en Cali, con la ministra Muhamad como presidenta.
La conferencia, que se reanudará el 25 de febrero en Roma, busca desbloquear el conflicto Norte-Sur sobre la financiación necesaria para detener la destrucción de la naturaleza en los próximos cinco años. Este escenario se enmarca en el compromiso asumido en la COP de 2021 para reducir a cero la deforestación para 2030.