Un feroz incendio forestal en las proximidades de Los Ángeles (California) ha forzado a cientos de residentes a evacuar sus hogares, mientras una ola de calor extremo afecta la región.
El fuego, que comenzó el jueves en el Bosque Nacional de San Bernardino, ha arrasado más de 70 kilómetros cuadrados de terreno y amenaza a 35,000 edificaciones, sin control alguno hasta el momento.
El gobernador Gavin Newsom declaró estado de emergencia y ordenó evacuaciones en comunidades cercanas. Más de 600 bomberos están combatiendo el fuego, que ha dejado a tres de ellos heridos.
La región también ha sufrido temperaturas récord de hasta 44°C, agravando las condiciones.
Oye, pero ¿y dónde están las autoridades de Los Ángeles? Parece que tan ocupados haciendo películas y se les olvidó apagar el fuego de verdad.
Los bomberos están haciendo lo que pueden, pero las autoridades andan más perdidas que un turista en la 42 buscando el metro.
Ya Los Ángeles parece más un horno que una ciudad, pero las autoridades solo saben apagar fuegos en las redes, no en la realidad.
Si las autoridades de Los Ángeles fueran tan rápidas como pa’ echarle la culpa al cambio climático, este fuego ya estaría apagao’ hace rato.
Al paso que van, lo próximo será que las autoridades les pidan a los ciudadanos que lleven su propia manguera para ayudar con el incendio.
Se necesita más que un tweet de las autoridades pa’ apagar este fuego, porque en Los Ángeles se están quemando hasta las promesas.
Los Ángeles arde y las autoridades solo están pa’ dar declaraciones, mientras la gente tiene que salir corriendo por su vida.
El único plan de las autoridades pa’ este incendio es esperar que la lluvia llegue y apague la candela por ellos.
Con tanta tecnología en Los Ángeles, pero las autoridades no pueden prevenir ni un fuego; parece que solo sirven pa’ tomarse selfies en las reuniones.
Las autoridades dicen que están en control, pero la realidad es que el único control que tienen es el del aire acondicionado en sus oficinas.