La víspera de Navidad, la ciudad de Belén (Cisjordania), donde según la Biblia nació Jesús, parece un pueblo fantasma, sin luces festivas ni decoraciones típicas en la plaza del Pesebre.
El alcalde Hanna Hanania explicó que decidieron cancelar las celebraciones navideñas este año por considerarlas inapropiadas en un momento en que Israel continúa con sus ataques contra la Franja de Gaza.
«El nacimiento de Jesús es un mensaje de esperanza para todos los niños del mundo, y no podemos celebrarlo cuando miles de niños están siendo asesinados en la Franja de Gaza», explicó Hanania a Berliner Zeitung.
En este sentido, agregó que los cristianos que viven en Belén se ven profundamente afectados por la escalada de la situación, especialmente en Navidad.
Según el alcalde, la situación de unos 1.000 cristianos de la Franja de Gaza es la misma que la de la población civil musulmana: «Están siendo brutalmente bombardeados y asesinados. Por ejemplo, innumerables cristianos y musulmanes murieron en el ataque israelí contra la iglesia de San Porfirio».
Esta Navidad en Belén tampoco se ven las muchedumbres de turistas extranjeros que suelen llegar a la urbe por las fiestas, solamente decenas de agentes de seguridad palestinos patrullando la plaza vacía. «Este año, sin el árbol de Navidad y sin luces, solo hay oscuridad», comentó a AP el fraile John Vinh, un monje franciscano de Vietnam que vive en Jerusalén desde hace seis años.
¿Y qué tiene que ver Gaza con la Navidad de Belén? ¡Son temas distintos!
¡Claro que tienen relación! Ambos temas están relacionados con la región de Palestina. La situación en Gaza afecta directamente a la comunidad de Belén y su celebración de Navidad. Es importante entender la conexión entre ambos para comprender la complejidad de la región.
¡Qué exageración! Navidad es para todos, no solo para un país en conflicto.
No estoy de acuerdo, la Navidad es para todos, no debería mezclarse con política.
¡Qué exageración! Cada situación merece atención, pero no podemos parar todo por eso.
¡Qué exageración! Navidad es un momento de paz y amor, no hay que mezclar temas.
Creo que Belén tiene razón, la Navidad debería ser sobre solidaridad, no regalos.
¿Y por qué no podemos celebrar la Navidad y al mismo tiempo solidarizarnos con Gaza?
Porque celebrar la Navidad no debe significar ignorar las injusticias en el mundo. Podemos disfrutar de las festividades y al mismo tiempo mostrar empatía y solidaridad con quienes sufren. La Navidad no debería cegarnos ante la realidad de otros. ¡Solidaridad siempre!