Arabia Saudita rechazó la sugerencia del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, de que el reino podría albergar un Estado palestino. En un comunicado, el Ministerio de Relaciones Exteriores saudí acusó a Netanyahu de tratar de desviar la atención de los ataques de Israel en Gaza y reiteró que los palestinos tienen derecho a su tierra y no pueden ser expulsados arbitrariamente.
Las declaraciones de Netanyahu generaron reacciones de condena en varios países árabes, incluidos Qatar, Jordania, Egipto, Emiratos Árabes Unidos, Kuwait e Irak, así como en el Consejo de Cooperación del Golfo.
Estas naciones criticaron el comentario como una muestra del desprecio de Israel por el derecho internacional y la soberanía de los Estados. Arabia Saudita también agradeció el respaldo de sus aliados en la región.
El tema de la reubicación de palestinos ha sido motivo de controversia, con propuestas previas como la del expresidente estadounidense Donald Trump, quien sugirió que EE.UU. «tomara el control» de Gaza.
Mientras tanto, la ofensiva israelí en Gaza ha causado más de 61.700 muertes, en su mayoría civiles, y destruido gran parte del enclave, mientras que Hamás mató a 1.139 personas en su ataque del 7 de octubre.