Una investigación a gran escala, con datos de más de un millón de pacientes de cuatro continentes, ha determinado que existe predisposición genética hacia la adicción al cánnabis, y que quienes la padecen tienen más riesgo de sufrir cáncer de pulmón.
El descubrimiento, publicado este lunes en la revista Nature Genetics, ha sido liderado por la Universidad de Yale y ha contado con la participación, entre otros, de la investigadora de la Universidad de Barcelona, Dora Koller.
“La idea de este estudio parte de que creemos que, a medida que aumenta la permisividad en torno al consumo de cánnabis, se hace necesario comprender los riesgos asociados al trastorno que provoca su adicción para poder desarrollar una farmacoterapia para abordarlo”, señaló a EFE uno de los autores, Joel Gelernter, profesor de Genética en la Universidad de Yale.
Entre las consecuencias negativas para la salud conocidas hasta ahora de esta adicción a la marihuana, que desarrollan más de un tercio de las personas que la consumen, se encuentran “el deterioro de la función cognitiva, además de implicaciones sociales como la disminución de la productividad y el riesgo de accidentes en estado de embriaguez”.
El análisis genético a gran magnitud, conocido hoy ha cifrado datos de 1,054,365 individuos de los cuales 886,025 eran europeos; 123,208 africanos; 38,289 estadounidenses mestizos; y 6,843 asiáticos.
Los investigadores han identificado cientos de variantes de riesgo de desarrollar adicción, y su consecuente trastorno, a esta sustancia en 22 localizaciones cromosómicas diferentes.
El análisis y la comparación de resultados indicó, además, que existe una relación genética entre el trastorno por consumo de cánnabis y varios rasgos, como el inicio del tabaquismo y la dependencia del alcohol, tanto en poblaciones de ascendencia europea como africana.
Igualmente, han hallado pruebas genéticas que apoyan una posible influencia causal del trastorno por consumo de cánnabis en el riesgo de cáncer de pulmón en la población europea.
Además, el estudio ha descubierto relaciones causales entre el consumo de cánnabis y la esquizofrenia.
«Aunque “será necesario seguir investigando para establecer una relación definitiva, nuestros resultados plantean implicaciones muy nocivas para la salud del consumo de cánnabis para la salud”, dijo Gelernter.
Otro de los autores principales, Daniel Levey, profesor de Psiquiatría en la Universidad de Yale, expresó a EFE que “esta investigación servirá para comprender la biología del trastorno por consumo de cánnabis, y nos proporcionará mejores herramientas para averiguar cómo se relaciona genética y biológicamente con otros trastornos».
«Gracias a este estudio contaremos con valiosas perspectivas sobre la interacción entre genética, consumo de cannabis, psicopatología y posibles consecuencias para la salud pública. Y, sobre todo, será un paso adelante para, en el futuro, poder personalizar la predicción del riesgo a esta adicción y su tratamiento», culminó Levey.
El vínculo entre la predisposición genética a la adicción al cannabis y el riesgo de cáncer de pulmón es preocupante.
Esto es alarmante. Nunca pensé que la adicción al cannabis pudiera estar relacionada con el riesgo de cáncer de pulmón. Es importante saber más sobre esto.
Nunca había considerado que la genética pudiera influir tanto en la adicción al cannabis. Estos hallazgos realmente hacen que piense dos veces antes de considerar su uso.
Esto debería ser difundido ampliamente. La gente necesita saber sobre los riesgos asociados con la adicción al cannabis, especialmente si puede afectar la salud de esta manera.
La identificación de relaciones causales entre el consumo de cánnabis y ciertos rasgos refuerza la comprensión integral de los impactos de esta sustancia.
No tenía idea de que la adicción al cannabis pudiera tener consecuencias tan graves! Es aterrador pensar en el riesgo de cáncer de pulmón asociado a esto.
Esto pone en perspectiva la importancia de regular el consumo de cannabis. Deberíamos ser más conscientes de los riesgos reales que pueden surgir.
Qué estudio tan masivo. No me imaginaba que la ciencia pudiera llegar a analizar datos genéticos de más de un millón de personas.
La relación entre el consumo de cannabis y la esquizofrenia es inquietante. Esto destaca la necesidad de hablar más sobre la salud mental y las drogas.
Esto es un recordatorio para educar a la gente, especialmente a los jóvenes, sobre los riesgos del consumo de cannabis. La prevención es clave.
La idea de personalizar la predicción del riesgo de adicción al cannabis suena prometedora.
La investigación a gran escala liderada por la Universidad de Yale aporta información valiosa sobre la predisposición genética a la adicción al cánnabis.
Este estudio destaca la relevancia de la ciencia en la toma de decisiones para la salud y la importancia de continuar investigando para ampliar nuestro conocimiento.
La diversidad de la muestra, que incluye individuos de Europa, África, Estados Unidos y Asia, proporciona una base robusta para las conclusiones del estudio.