Carlos III de Inglaterra recibió este miércoles los Honores de Escocia en una ceremonia multitudinaria y solemne, donde se le hicieron entrega de las milenarias reliquias reales escocesas -la corona, cetro y la espada- para culminar con el proceso de su coronación como monarca británico.
En la catedral de St Giles, en el corazón de Edimburgo, la misma que despidió a la difunta Isabel II de Inglaterra el año pasado, se rubricó la entronización de su hijo, Carlos III, y de la reina consorte Camila y, con ello, la continuidad de la dinastía de los Windsor.
Al acto principal de su coronación en la Abadía de Westminster en Londres en mayo le siguió hoy la entrega de la corona de Escocia, su cetro y la espada de Estado al nuevo rey, emulando así la liturgia que protagonizaron en 1953 su madre Isabel Isabel II y su padre, Felipe de Edimburgo.
Antes de la ceremonia, los Honores fueron portados en un Rolls Royce negro escoltado por la Compañía Real de Arqueros hasta la catedral desde el castillo de Edimburgo, acompañados por el sonido de las gaitas escocesas y algunos abucheos de antimonárquicos congregados estratégicamente a su entrada.
Antes de la ceremonia, los Honores fueron portados en un Rolls Royce negro escoltado por la Compañía Real de Arqueros hasta la catedral desde el castillo de Edimburgo, acompañados por el sonido de las gaitas escocesas y algunos abucheos de antimonárquicos congregados estratégicamente a su entrada.
Escocia en una ceremonia multitudinaria y solemne
Como se lo merece
pero que escosia
y por que