Cada 4 de marzo se celebra el Día Mundial de la Obesidad, una fecha promovida por la Federación Mundial de la Obesidad para concienciar sobre los riesgos de esta enfermedad y fomentar hábitos saludables.
La obesidad ha alcanzado niveles preocupantes a nivel global, triplicándose desde 1975 y afectando a casi 2.000 millones de adultos y 340 millones de niños y adolescentes en 2016. La Organización Panamericana de la Salud estableció el lema de 2024 como «Hablemos de obesidad y…», con el objetivo de generar conversaciones sobre esta problemática desde distintos enfoques.
La obesidad es una acumulación excesiva de grasa corporal que aumenta el riesgo de enfermedades graves como hipertensión, diabetes tipo II, problemas cardiovasculares, apnea del sueño y ciertos tipos de cáncer.
Factores como el sedentarismo, la alimentación poco saludable y la publicidad de comida rápida han contribuido al aumento de casos en todo el mundo. Países como Estados Unidos y Egipto tienen las tasas más altas de obesidad infantil y adulta, respectivamente. Además, la mayoría de las personas afectadas por esta condición son mujeres.
Para prevenir la obesidad, se recomienda mantener una dieta equilibrada y realizar actividad física regularmente. También se aconseja evitar el consumo excesivo de azúcares y grasas, reducir el tiempo de inactividad y fomentar hábitos saludables desde edades tempranas.
En este día, se promueven actividades como chequeos médicos, eventos deportivos y campañas de concienciación en redes sociales con el hashtag #DiaMundialdelaObesidad.