Desde el inicio de los ataques de Israel contra la Franja de Gaza el 7 de octubre de 2023, la ciudad de Jabalia se ha convertido en uno de los escenarios más devastados del enclave palestino.
Según un reportaje del Financial Times, este antiguo asentamiento, con una profunda carga histórica y cultural para israelíes y palestinos, ha sido reducido a escombros tras los intensos bombardeos e incursiones terrestres de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI).
Jabalia, situada al norte de Gaza y hogar de aproximadamente 200,000 personas, incluidas más de 100,000 refugiados registrados, tiene un lugar emblemático en la historia palestina. Fue allí donde, en 1987, estalló la primera intifada, marcando el inicio de un levantamiento masivo contra la ocupación israelí.
Tras el ataque de Hamás contra comunidades israelíes en octubre, que dejó 1,200 muertos y 253 secuestrados, la respuesta militar israelí ha causado al menos 46,500 muertes en Gaza, la mayoría mujeres y niños. Jabalia ha sido particularmente golpeada, con al menos 2,500 muertos confirmados, cifra que podría duplicarse debido a cuerpos atrapados bajo los escombros, según funcionarios locales.
Ibrahim al-Kharabishi, un abogado palestino que permanece en Jabalia con su familia, describe una situación aterradora:
“Vemos cuerpos que nadie se atreve a retirar. Los heridos piden ayuda, pero quien intenta socorrerlos cae también. Escuchamos sus voces apagarse una por una.”
Un alto funcionario israelí admitió que la región del norte de Gaza, incluida Jabalia, nunca volverá a ser la misma. Israel planea establecer una “zona de amortiguamiento” que creará una mayor separación física entre las comunidades israelíes y las ciudades palestinas.
“Puedes llamarla tierra agrícola o zona de seguridad, pero su propósito es claro”, señaló el funcionario.
Por otro lado, las negociaciones en Doha para un posible alto el fuego y la liberación de rehenes traen algo de esperanza, aunque los habitantes que regresen a Jabalia encontrarán un paisaje completamente destrozado y desolado.
Organizaciones humanitarias aseguran que quedan solo unos pocos miles de personas en el norte de Gaza, mientras los desplazados enfrentan condiciones extremas en el sur. La reconstrucción de Jabalia, si es que llega a realizarse, requerirá décadas y una voluntad política que aún parece lejana.