Las Fuerzas Armadas de Ucrania lanzaron un ataque con misiles HIMARS, de fabricación estadounidense, contra la ciudad de Lgov, en la provincia rusa de Kursk.
Este ataque, ocurrido este miércoles, impactó áreas residenciales e infraestructuras, dejando un saldo inicial de cuatro fallecidos y cinco heridos, uno de ellos en estado grave.
El bombardeo causó graves daños en un edificio de apartamentos de cinco plantas, otras dos edificaciones de una sola planta y un salón de belleza, además de destruir al menos 12 vehículos y generar cráteres en las calles. La explosión también afectó el suministro de gas y electricidad en la zona afectada.
Las imágenes del impacto, difundidas en redes sociales, muestran escombros, incendios y daños significativos en las calles y viviendas. Las autoridades rusas han denunciado el ataque como una agresión directa contra civiles e infraestructuras no militares.