El presidente de Rusia, Vladímir Putin, y el primer ministro de Eslovaquia, Robert Fico, se reunieron en Moscú para discutir varios temas clave, entre ellos el conflicto ucraniano, el sector energético y las relaciones bilaterales entre ambos países.
Según Dmitri Peskov, portavoz del Kremlin, la conversación fue «profunda» y permitió a los líderes intercambiar puntos de vista sobre la situación en Ucrania. Putin compartió su visión sobre el conflicto en el terreno, mientras Fico escuchaba las preocupaciones rusas.
En cuanto a los asuntos energéticos, la situación en Europa fue uno de los puntos críticos tratados durante el encuentro. Peskov destacó la preocupación por las dificultades energéticas que enfrentan algunos países europeos, que siguen dependiendo del gas ruso para el funcionamiento de sus economías. Este tema es especialmente relevante dado que los países europeos continúan comprando gas a Rusia, a pesar de la situación en Ucrania.
La reunión entre Putin y Fico, que marcó el primer contacto cara a cara en más de ocho años, también fue una respuesta a las declaraciones del presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, sobre su oposición al tránsito de gas a través de Ucrania.
Tras el encuentro, Fico expresó en redes sociales que Putin le aseguró que Rusia continuará suministrando gas a Occidente y a Eslovaquia, una promesa que podría tener implicaciones significativas para la región en los próximos meses.