El líder opositor venezolano, Edmundo González Urrutia, aseguró este lunes estar “moralmente preparado” para enfrentar cualquier intento de detención al regresar a Caracas el próximo 10 de enero, fecha en la que planea asumir la presidencia del país, tras haber obtenido 7,3 millones de votos en las elecciones del 28 de julio.
En una entrevista con EFE, González Urrutia, abanderado de la Plataforma Unitaria Democrática (PUD), reiteró su llamado a una transición pacífica en Venezuela.
“Es crucial que el chavismo tenga un espacio en el futuro político del país. Las bases populares no deben ser excluidas”, afirmó, subrayando que su mandato priorizará la reconciliación y la liberación de más de 2,000 presos políticos.
Respecto a las órdenes de captura emitidas contra él y María Corina Machado, González calificó estas acciones como “señales de debilidad” del régimen de Nicolás Maduro. También respaldó la movilización ciudadana convocada por Machado para el 1 de diciembre, aunque advirtió sobre posibles actos de violencia por parte del chavismo.
“Nuestro objetivo es abrir un espacio para la recuperación integral de Venezuela: política, económica y social. La Constitución venezolana solo permite un presidente, y el 10 de enero asumiré ese rol”, concluyó González Urrutia, quien aboga por negociaciones previas que garanticen una transición ordenada y pacífica.