La Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos (ACNUDH) publicó un informe que revela que casi el 70% de las muertes verificadas en Gaza son mujeres y niños. Según el informe, 44% de las víctimas eran niños, y el más joven tenía solo un día de vida.
El alto responsable de derechos humanos, Volker Turk, condenó la «aparente indiferencia» de Israel ante las muertes civiles y criticó la falta de cumplimiento con las reglas de la guerra, que buscan limitar el sufrimiento humano en los conflictos armados.
El informe destacó que en el 88% de los casos, cinco o más personas murieron en un solo ataque, lo que sugiere el uso de armas de amplio impacto en áreas densamente pobladas.
Las víctimas también incluyeron a una mujer de 97 años. La ONU señaló que estos ataques “generalizados o sistemáticos” contra civiles podrían ser considerados crímenes de guerra y, si se realizan con la intención de destruir parcialmente a un grupo étnico o religioso, podrían constituir genocidio.
Además, la ONU subrayó las dificultades en la entrada de ayuda humanitaria a Gaza y la destrucción de infraestructuras civiles. El informe también denunció los desplazamientos masivos de personas y los niveles extremos de hambruna y enfermedades.
Según el Ministerio de Salud de Gaza, desde el inicio de la ofensiva israelí el 7 de octubre de 2023, más de 43,000 palestinos han muerto y más de 102,000 han resultado heridos.