Hezbollah lanzó alrededor de 30 cohetes desde Líbano hacia el norte de Israel, resultando en al menos dos muertes y siete heridos. Los ataques impactaron principalmente en la localidad árabe de Majd al Krum, donde un gimnasio fue alcanzado.
Los servicios de emergencias israelíes informaron que entre los heridos hay dos jóvenes y una mujer en estado crítico. La situación en la región se ha deteriorado considerablemente, con más de 2,500 muertes en Líbano desde el inicio de la escalada, la mayoría en el último mes.
En respuesta, el Ejército israelí realizó bombardeos en el sur de Beirut, apuntando a centros de mando y almacenes de armamento de Hezbollah.
Recientemente, Israel también abatió a Abbas Adnan Moslem, un comandante de la unidad élite Radwan de Hezbollah, quien estaba involucrado en ataques contra comunidades israelíes.
Las fuerzas israelíes han intensificado sus operaciones en el sur de Líbano, afirmando haber atacado más de 200 objetivos relacionados con el grupo.
La escalada del conflicto ha dejado un saldo significativo de víctimas en ambos lados. Desde el inicio del intercambio de fuego el 8 de octubre, al menos 52 israelíes han muerto, la mitad de ellos civiles, y más de 700 en Líbano, la mayoría combatientes de Hezbollah. La situación continúa siendo tensa, con enfrentamientos y bombardeos en curso.