República Dominicana. – El Cuerpo Especializado en Seguridad Fronteriza Terrestre (CESFronT), en colaboración con miembros del Ejército, interceptó a 34 ciudadanos haitianos que ingresaron de manera irregular al país por la zona conocida como «Sabana de Los Miches», en Dajabón.
El grupo estaba compuesto por 28 hombres, 5 mujeres y un menor de edad. Los detenidos fueron entregados a la Dirección Nacional de Migración para los procedimientos correspondientes.
Estas acciones forman parte de los esfuerzos del CESFronT, junto con el 10º Batallón del Ejército y su Departamento de Inteligencia (C-2), por fortalecer la seguridad en la frontera y combatir actividades ilegales, reafirmando el compromiso de las Fuerzas Armadas con la protección de la soberanía nacional.
Ese cruce de haitianos no para, CESFronT tiene que estar siempre en pie de guerra.
Qué difícil la situación de esos haitianos, pero las leyes hay que respetarlas.
Parece que el control fronterizo está funcionando, 34 personas no es cualquier cosa.
El CESFronT está fajao en la frontera, haciendo su trabajo sin descanso.
Hay que reconocer el esfuerzo del Ejército, pero la situación en la frontera es preocupante.
Siempre son grupos grandes los que tratan de entrar, y eso muestra la crisis que hay del otro lado.
Las mujeres y los niños son los que más sufren en esos cruces ilegales, es una pena.
El control de la frontera es clave, porque no solo es el cruce de personas, también es la seguridad del país.
Cada vez que detienen a un grupo así, se nota que las autoridades están haciendo su trabajo.
Esas colaboraciones entre CESFronT y el Ejército son importantes para mantener la soberanía.
El problema de la migración irregular no va a terminar de un día para otro, pero estos esfuerzos ayudan.
Siempre son en zonas como Sabana de Los Miches donde logran detener a grupos grandes.
Esos operativos ayudan a controlar la situación, pero ojalá que se busque una solución más a largo plazo.
La frontera sigue siendo un tema delicado, y más con la situación en Haití empeorando cada día.
El Ejército está fajado, pero la cantidad de gente que intenta cruzar es una locura.