Al menos 30 ciudades del estado de Sao Paulo, Brasil, están en alerta máxima debido a los 2.300 incendios forestales registrados entre el jueves y el viernes, según el Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (INPE).
Las llamas han provocado la muerte de dos personas y el cierre de carreteras en varias zonas.
Localidades como Pitangueiras, Altinópolis y Sertaozinho están entre las más afectadas. El clima seco y el calor extremo han exacerbado la situación, llevando al gobierno estatal a crear una oficina de crisis para gestionar la emergencia.
La calidad del aire se ha deteriorado significativamente en la región debido al humo y la contaminación.
El Gobierno advirtió que el clima seco y las ráfagas de viento intensifican el riesgo de que el fuego se propague rápidamente, afectando grandes áreas de vegetación natural. Las autoridades se mantendrán en alerta durante el fin de semana para vigilar de cerca la evolución de la situación y responder de manera inmediata a cualquier nuevo brote de incendios.
Qué situación tan crítica en Sao Paulo! Esos incendios no dan tregua.
El calor y el clima seco son una combinación peligrosa, es difícil controlar tantos incendios a la vez.
Con tantas ciudades en alerta máxima, la respuesta del gobierno tiene que ser rápida y efectiva.
La contaminación por el humo debe estar afectando muchísimo la salud de la gente en esas zonas.
Es una pena la pérdida de vidas humanas por estos incendios, ojalá no haya más víctimas.
La situación es crítica en São Paulo con 2.300 incendios forestales, que exigen una respuesta inmediata y coordinada
Las autoridades deben priorizar la protección de vidas y la gestión eficiente de los recursos para combatir los incendios.
La contaminación del aire es una preocupación creciente debido a la magnitud de los incendios forestales en la región.
La cooperación entre gobiernos locales y organismos internacionales será crucial para enfrentar la crisis de los incendios.
La comunidad debe estar alerta y seguir las recomendaciones oficiales para mantenerse a salvo y apoyar los esfuerzos de combate.