El Consejo Permanente de la Organización de los Estados Americanos (OEA) aprobó este viernes una resolución que demanda al gobierno de Venezuela la publicación inmediata de las actas de las elecciones presidenciales del 28 de julio. La medida, presentada por Estados Unidos junto a otros 10 países, busca garantizar la transparencia y credibilidad del proceso electoral.
El documento insta al Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela a divulgar sin demora los resultados detallados de cada mesa de votación. Además, la resolución subraya la necesidad de proteger los equipos y documentos utilizados en el proceso electoral para preservar la integridad del mismo.
La OEA también hizo un llamado a las autoridades venezolanas para que respeten los derechos humanos y las libertades fundamentales, incluyendo la protección de instalaciones diplomáticas y el personal en el país. Esta resolución se suma a las presiones internacionales para una revisión imparcial de los resultados, en los que Nicolás Maduro fue declarado ganador sobre el candidato opositor Edmundo González Urrutia.El embajador de Estados Unidos ante la OEA, Francisco Mora, reafirmó el compromiso de la organización con el pueblo venezolano, destacando la importancia de apoyar sus derechos y libertades en este momento crítico.
¡Ya era hora de que la OEA exigiera transparencia en Venezuela! La resolución pide que publiquen las actas y protejan los documentos. A ver si así se aclara todo.
A Nicolás Maduro le está cayendo el peso internacional. La presión para revisar los resultados de las elecciones y respetar los derechos humanos está fuerte.
Estados Unidos y otros países están metiendo presión para que Venezuela publique los resultados de las elecciones. Esto puede ser clave para asegurar que todo sea más claro.
El llamado de la OEA para proteger los equipos y documentos del proceso electoral muestra que quieren asegurarse de que no haya trampa. ¡Buena movida!
La OEA está pidiendo que se respeten los derechos humanos y las libertades fundamentales en Venezuela. Esto incluye proteger las instalaciones diplomáticas y el personal.