La Casa Blanca ha negado su participación en el acuerdo de culpabilidad que permitió al fundador de WikiLeaks, Julian Assange, regresar a Australia, poniendo fin a su batalla legal de doce años contra la extradición a Estados Unidos.
Aunque el presidente Joe Biden mencionó un posible acuerdo impulsado por representantes del Gobierno australiano para cesar la persecución contra Assange, un funcionario de Washington aclaró a CNN que la Casa Blanca no intervino en la decisión. Adrienne Watson, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, declaró que la decisión fue tomada independientemente por el Departamento de Justicia.
Assange aterrizó este miércoles en Canberra tras ser liberado por un tribunal en Saipán, Islas Marianas del Norte. En su acuerdo con el Departamento de Justicia, se declaró culpable de conspiración para obtener y difundir información de defensa nacional, siendo sentenciado al tiempo ya cumplido en prisión.