Este fin de semana, alrededor de 90 países y organizaciones internacionales se reunirán en Bürgenstock, Suiza, en una cumbre concebida como un «primer paso» hacia la paz en el conflicto entre Rusia y Ucrania. La reunión, encabezada por el presidente ucraniano Volodimir Zelensky, busca establecer un consenso global más allá de los aliados occidentales de Ucrania, incluyendo países del Sur Global que Moscú ha intentado cortejar.
Zelensky ha destacado tres puntos principales que generan más consenso dentro del plan de diez puntos defendido por Kiev y Occidente desde 2022:
1. Libre Navegación en el Mar Negro: Este punto se enfoca en garantizar la seguridad alimentaria mundial permitiendo las exportaciones de cereales ucranianos, una cuestión de gran relevancia para los países del Sur Global que dependen de estas exportaciones.
2. Seguridad Nuclear y Energética: La seguridad nuclear y energética es crucial, especialmente debido a los bombardeos rusos que han destruido infraestructura civil en Ucrania y el riesgo continuo de un incidente nuclear en la central de Zaporizhzhia, ocupada por las tropas rusas.
3. Regreso de Niños Ucranianos Deportados: Un tema humanitario crítico es el regreso de aproximadamente 20,000 niños ucranianos deportados a Rusia. La Corte Penal Internacional emitió una orden de detención contra Vladimir Putin en 2023 por este hecho.
Aunque 90 países han confirmado su asistencia, Rusia no ha sido invitada a la cumbre. China tampoco parece estar participando, lo que podría limitar el alcance de los acuerdos alcanzados. El Kremlin ha calificado la reunión de «absurda», restando importancia a sus posibles resultados.
El objetivo de la cumbre es forjar un consenso mundial sobre los puntos clave mencionados, lo que, según Zelensky, significaría que Rusia ya no podrá bloquear estos temas en la escena internacional. Esta cumbre sigue a la reciente reunión del G7 en Italia, subrayando la importancia de la seguridad y la cooperación internacional en la búsqueda de una solución pacífica al conflicto.
El conflicto en Ucrania ha tenido profundas implicaciones globales, desde la seguridad alimentaria hasta la estabilidad energética y nuclear. La cumbre en Suiza representa un esfuerzo significativo para abordar estos desafíos de manera multilateral y buscar soluciones que puedan ser aceptables para una amplia gama de naciones.
La cumbre de paz en Suiza es un intento crucial de avanzar hacia la resolución del conflicto entre Rusia y Ucrania. Aunque enfrenta desafíos significativos, particularmente la ausencia de Rusia y China, la reunión ofrece una plataforma para construir consenso y fomentar el diálogo entre una coalición diversa de países. El éxito de la cumbre podría marcar un paso importante hacia una paz duradera y la estabilización de la región.